Ángela Lisbeth Expósito Carrillo, nacida en 1965 en Venezuela, es una profesora de biología egresada de la Universidad Simón Bolívar (USB), investigadora en conservación de fauna silvestre y estudiante de derecho. Desde los ocho años, se dedicó al rescate de animales, registrando en 2009 la ONG Fundanimal, de la que es directora, enfocada en ayudar a mascotas abandonadas y en situación de riesgo. Su trabajo la llevó a cuidar animales de personas perseguidas políticamente, como los del expolicía Oscar Pérez (asesinado en 2018) y del coronel Oswaldo García Palomo, según Efecto Cocuyo.
Expósito no tiene una trayectoria política activa ni afiliación a partidos, pero su conexión indirecta con opositores la convirtió en objetivo del régimen. Como proteccionista, habilitó su hogar en Los Teques, Miranda, como refugio para mascotas, incluyendo perros como Thor y Arpa de García Palomo, según El Digital de Canarias. Su labor humanitaria, que incluyó investigaciones sobre mamíferos cinegéticos y proyectos de conservación, la posicionó como una figura respetada en la sociedad civil, pero en el contexto de la represión chavista, fue estigmatizada como «encubridora» de terroristas, según Change.org.
Detención como presa política
El 22 de septiembre de 2018, Expósito fue detenida por el Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (SEBIN) en su residencia en Los Teques, Miranda, sin orden de allanamiento, según Efecto Cocuyo. Agentes armados irrumpieron en la casa, allanaron sin testigos y se llevaron a Expósito, sus animales (incluyendo perros y una guacamaya) y objetos personales como televisores y guitarra, según su hermana Elsy Expósito, citada en el mismo artículo. El allanamiento fue justificado como búsqueda de un «terrorista» vinculado al atentado con drones contra Maduro en agosto de 2018, según El Confidencial.
Imputada por «terrorismo», «financiamiento al terrorismo» y «asociación para delinquir», Expósito fue presentada ante un tribunal el 27 de septiembre de 2018, sin flagrancia ni pruebas directas, según El Digital de Canarias. Su detención se basó en supuestos vínculos con Henryberth Rivas Vivas («Morfeo»), un fugitivo supuestamente escondido en su casa, aunque no se encontró evidencia, según Change.org. El juicio, iniciado en diciembre de 2019, se redujo a 19 pruebas de 300, plagado de irregularidades, según su abogada Theresly Malavé Wadskier, citada en Infobae.
En agosto de 2022, fue condenada a 24 años de prisión por el Tribunal 31 de Control, en un proceso sin debido proceso, según Efecto Cocuyo. Foro Penal la incluye en listas de presas políticas, destacando su inocencia, según su reporte de 2020.
Condiciones de detención y estado de salud
Expósito cumple sentencia en El Helicoide, sede del SEBIN, donde ha sufrido torturas «de la Edad Media», según su abogada Malavé Wadskier, citada en Infobae. Incluyen aislamiento de 45 días, bolsas plásticas para asfixia y golpes, según el Informe de la Misión Internacional de la ONU. Su salud se ha deteriorado: asma, trastornos respiratorios, nódulos tiroideos en crecimiento y problemas bacteriológicos en la piel, agravados por la negligencia médica, según Elsy Expósito en Efecto Cocuyo.
Los animales rescatados, como Thor (mastín de Pérez), fueron torturados y trasladados a El Helicoide, donde permanecían en 2024, según eldiario.com. Expósito no ha sido sometida a torturas físicas recientes, pero el aislamiento y la falta de atención médica persisten, según su hermana.
Reacciones nacionales e internacionales
La detención de Expósito ha generado condena. Foro Penal denunció su arresto el 24 de septiembre de 2018, destacando su inocencia y el robo durante el allanamiento, según su tuit. El Observatorio de Derechos Humanos publicó en 2021 un informe sobre presas políticas torturadas, incluyendo su caso, según El Digital de Canarias. Su hermana Elsy y abogada Malavé Wadskier denuncian el juicio como «farsa», exigiendo excarcelación humanitaria, según Infobae.
Internacionalmente, Amnistía Internacional la cataloga como presa política, exigiendo su liberación, según su informe de 2020. La CIDH y la ONU documentaron torturas en El Helicoide, según Efecto Cocuyo. En 2023, fue homenajeada en murales en Bogotá, San José y Santiago por el Día Internacional de la Mujer. Peticiones en Change.org, iniciadas por su familia, recolectan firmas para su libertad, destacando su labor humanitaria.