Edmundo González Urrutia, presidente electo de Venezuela, actualmente exiliado en Madrid tras denunciar el fraude electoral de julio de 2024, celebró la resolución del Parlamento Europeo que urge a la Unión Europea (UE) incluir al Cártel de los Soles en su lista de organizaciones terroristas.

“El mensaje del mundo está muy claro: Venezuela merece justicia y un futuro democrático”, afirmó en X, destacando que esta acción evidencia la atención global sobre la crisis venezolana.

Junto a María Corina Machado, González lidera el Comando Con Venezuela, que agradeció la moción aprobada con 355 votos a favor, 173 en contra y 15 abstenciones.

La resolución RC10-0366/2025, impulsada tras el asesinato del senador colombiano Miguel Uribe Turbay, denuncia al Cártel de los Soles, liderado por Nicolás Maduro, Diosdado Cabello, Jorge Rodríguez, Delcy Rodríguez y Vladimir Padrino López, por facilitar el narcotráfico, contrabando de armas y lavado de dinero en la frontera colombo-venezolana. La Eurocámara expresó “grave preocupación” por estas estructuras transnacionales que apoyan el terrorismo, socavan la democracia colombiana y desestabilizan la región, urgiendo a Kaja Kallas actualizar la lista de terroristas de la UE.

González subrayó: “El mundo democrático se moviliza frente a las amenazas que suponen estas estructuras criminales”, destacando que la crisis venezolana es una prioridad regional.

Narcoterrorismo y resistencia: La lucha por la democracia venezolana

El Cártel de los Soles, designado terrorista por EE. UU. con una recompensa de 50 millones de dólares por Maduro, trafica cocaína al Caribe, Europa y África, según la DEA. Países como Panamá, Costa Rica, Puerto Rico y Perú se suman a la ofensiva, con el presidente José Mulino considerando declarar al Cártel terrorista. El cerco naval de EE.UU., con destructores y F-35, intensifica la presión tras el ataque del 2 de septiembre que mató a 11 narcotraficantes del Tren de Aragua.

Mientras el régimen adoctrina jóvenes del PSUV para una falsa “defensa” y Zapatero enfrenta sanciones por complicidad, la trata de personas (2.600 millones de dólares anuales) y el saqueo de Monómeros agravan la miseria. Docentes universitarios, con salarios de 1-3 dólares, protestan contra esta debacle.