Recientemente, el dictador Nicolás Maduro nombró a Diosdado Cabello como ministro de Interior, Justicia y Paz, en un escenario en el que la crisis electoral mantiene el ánimo nacional con grandes estruendos, a pesar que el silencio en las calles responda a la represión que se ha aplicado y ha atacado a ciudadanos, colaboradores, periodistas y defensores de Derechos Humanos.
La idiosincrasia venezolana siempre tiene un espacio para los chistes, para las bromas que buscan suavizar cualquier terrible situación que se pueda vivir en el país. Las risas, la creatividad y los comentarios suelen explayarse hasta un punto donde no hay reconciliación y es justo en este momento donde la conciencia del colectivo despierta y comenta: «Con Diosdado Cabello no se juega».
Parafraseando un poco, Maduro asegura que Cabello «sabe mucho de paz», pero esto suena más a una amenaza y a un indicativo de la nueva fase radical que el dictador está dispuesto a desarrollar para mantenerse en el poder.
El perfil
Diosdado Cabello, los inicios
Diosdado Cabello nació en 1963 en El Furrial, un municipio perteneciente al estado Monagas. Su padre Adrián era un sindicalista del partido Acción Democrática.
Teniendo la política como una visita recurrente en su hogar, era de esperarse que sus primeros pasos fuera de ella estuviesen reflejados sobre este espectro: Estuvo afiliado al «Partido del Pueblo» mientras estudiaba en la secundaria, luego conocería su interés por la carrera militar.
En la Academia Militar conoció a Hugo Rafael Chávez Frías, quien lo conduciría a la vida política que usa hoy para reprimir y perseguir a la ciudadanía venezolana.
Rápidamente se alió con Chávez y lo apoyó en el intento de golpe de Estado del 4 de febrero de 1992 contra el presidente Carlos Andrés Pérez.
Su rol dentro del golpe de Estado era «gestionar las comunicaciones de los insurrectos”, pero las antenas que serían usadas para ese propósito fallaron, por lo cual decidió recorrer las calles de Caracas para inspeccionar las operaciones de los militares que apoyaban al disturbio.
«Estuvo en el palacio de Miraflores y luego se desplazó al Batallón Pepe Alemán de Quinta Crespo para verificar por qué las tropas no se habían movilizado. Ahí fue detenido y golpeado luego de un tiroteo. Fingió estar muerto para sobrevivir al ataque: logró salvar la vida», señala el perfil publicado en Poderopedia.
Luego estuvo preso 22 meses por este ataque, no obstante siempre mantuvo su cercanía a Chávez, al cual apoyó en la campaña para la elección presidencial del 1998. La victoria del precursor del chavismo marcó un antes y después en la política venezolana.
Diosdado Cabello, los años con Chávez
Diosdado Cabello era vicepresidente de Venezuela cuando el golpe de Estado le explotó en la cara a Chávez durante 48 horas en abril del 2002. Bajo estas condiciones, tuvo que sentarse en la silla de Miraflores por unas horas, hasta que hizo su salto de lealtad y devolvió el poder a Chávez.
Cabello también fue ministro del Interior, de Infraestructura y gobernador del estado Miranda, a su vez encabezó la Comisión de Telecomunicación, tiempo en el que cerró decenas de radioemisoras en el 2009.
El espacio ministerial del Interior fue ocupado por Cabello luego de los sucesos del 2002, así que fungió como un manejador represivo de la tensión política y social que se vivía en el país.
Son muy recordados los momentos en los que Chávez regañaba a sus ministros durante el programa Aló Presidente y Cabello no fue la excepción. Durante el tiempo en el que era ministro de Obras Públicas y Vivienda, el presidente ahora fallecido le reclamó por la falta de compromiso relacionada con la construcción de la carretera Gamelotal-Buría en el estado Lara.
Cabello logró, entre sus cargos ministeriales, ser gobernador de Miranda, pero solo por un período porque luego perdería su reelección en el 2008 contra Henrique Capriles Randonski.
«Cabello fue derrotado, lo que fue interpretado como un gran traspié y obvia señal de rechazo a la gestión de uno de los delfines del presidente», señala la fuente consultada para este perfil.
Ya para esta altura, era muy común el señalamiento de la opinión pública sobre las presuntas actividades corruptas de Cabello en los puestos públicos que tomaba. El equipo de Capriles Radonski remitió a principios de 2009 un paquete de 17 casos a la Contraloría General de la República y al Ministerio Público sobre el desarrollo de redes corrupción durante su periodo gubernamental.
Para Chávez ya no era suficiente el apoyo del Gran Polo Patriótico, coalición de partidos políticos afectos al chavismo, así que decidió marcar mucho más su tendencia izquierdista con la fundación del Partido Socialista Unido de Venezuela (Psuv), del cual Cabello sería designado como el primer vicepresidente.
Luego que Chávez anunciara su recaída con el cáncer, Cabello era visto como uno de los posibles nombres que podría reemplazar al presidente, pero esa carrera la ganó Maduro en un autobús y con la característica que le faltaba a él: Es un civil.
Diosdado Cabello, la vida con Maduro
La cuota de poder de Cabello se estrechó con la llegada de Maduro en el poder, sin embargo se refugió en uno de los poderes más influyentes de la Constitución de Venezuela: El legislativo.
“Cabello siempre ha representado el «ala dura», el poder detrás de las sombras de la inteligencia de Estado, pero sin que estuviera claramente representado en la jerarquía de un organigrama”, declaró la politóloga Carmen Beatriz Fernández a BBC Mundo.
En las últimas sesiones que tuvo la Asamblea Nacional del 2010, Cabello, quien fungía como presidente del poder legislativo, designó a los 13 magistrados principales del Tribunal Supremo de Justicia, quienes trabajaron en contra de la Asamblea Nacional que fue elegida en el 2014.
Cabello ganaría nuevamente su curul como diputado en el 2015, pero en una Asamblea Nacional dominada por la oposición. Este espacio sería abandonado por él para tomar la presidencia de la Constituyente en el 2017, una estrategia que usó el régimen de Nicolás Maduro para atacar a la disidencia opositora.
Durante este tiempo, Cabello sería el objetivo de diferentes sanciones por parte de la Unión Europea, el gobierno de Suiza y de Panamá, siendo el último que lo tildó de ser una persona de alto riesgo «en materia de blanqueo de capitales, financiamiento del terrorismo y financiamiento de la proliferación de armas de destrucción masiva». Por último lo hizo el Departamento del Tesoro de Estados Unidos, que también sancionó a su hermano, José David, y a su esposa, Marleny Contreras.
El gobierno de Donald Trump en el 2020 ofreció una recompensa de hasta US $10 millones por información que llevaría al arresto de Diosdado Cabello y US $15 millones por la de Nicolás Maduro.
Diosdado Cabello, «Con el mazo dando»
Cabello creó el programa Con el mazo dando en el 2014, un espacio que lo consolidó y lo ayudó a crear su propia fuerza en un periodo en el que no poseía tanto poder dentro de las instituciones venezolanas.
Este programa empezó a ser la piedra angular que señalaba los pasos que daría el régimen de Nicolás Maduro en material comunicacional o funcionaba como una especie de anunciante ante las futuras acciones represivas que tomaría la dictadura.
¿Cómo operaba? Pues a través de constantes noticias propagandísticas pro régimen y críticas constantes contra la oposición y sus aliados en el exterior.
El Informe de la Misión Internacional Independiente para Venezuela del Consejo de Derechos Humanos de la ONU denunció en el 2023 que el programa es “regularmente utilizado para desacreditar a opositores reales o percibidos, llegando incluso a acusarlos de delitos graves”.
Asimismo, se afirmó que las declaraciones de Cabello “amenazan la seguridad de las personas contras las que van dirigidas, ya que en ocasiones han desencadenado procesos penales arbitrarios”.
Diosdado Cabello, el narcotraficante
En enero de 2015, el capitán de corbeta de las Fuerzas Armadas y exjefe de seguridad de Diosdado Cabello, Leamsy Salazar, lo acusó en Estados Unidos de ser el líder del Cártel de los Soles, una red de narcotráfico venezolana administrada únicamente por militares.
El medio internacional ABC de España publicó la noticia, sosteniendo que la única prueba que tenía Salazar contra Cabello fue verlo dar órdenes directas sobre la partida de lanchas cargadas de cocaína. En esta noticia se vinculó a Tareck El Aissami con el cartel y situó al hermano de Cabello, José David, como administrador de las cuentas
Hugo «El pollo» Carvajal, exdirector de la Inteligencia Militar venezolana (DIM), fue detenido en Aruba por órdenes de la Fiscalía de los Estados Unidos, país que lo tenía señalado como el jefe del Cartel de los Soles, sin embargo el testimonio de Salazar indicó que Carvajal solo seguía órdenes de Cabello.
Cabello desmintió los señalamientos de Salazar e insinuó que fue el responsable de la muerte de Chávez.
Noger Noriega, exsecretario de Estado, señaló en el 2015 que Estados Unidos tiene suficiente evidencia que vinculan a Cabello y El Aissami con actividades de narcotráfico.
En ese mismo año, Cabello introdujo una demanda en contra de los medios de comunicación El Nacional, Tal Cual y La Patilla por hacerse eco de lo publicado en el ABC de España.
The Wall Street Journal publicó un reportaje que indicó que la DEA (Administración para el Control de Drogas) y fiscales federales de Nueva York y Miami veían a Cabello como posible cabecilla y bajo sospecha de convertir a Venezuela «en un centro global de tráfico de cocaína y lavado de dinero».
En este reportaje también fue citado Julio Rodríguez, coronel retirado de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana, quien señaló que «Cabello tiene lazos estrechos con 46 de los 96 tenientes coroneles a cargo de batallones en Venezuela», además señala que Cabello jamás negociaría con Estados Unidos: “Diosdado es un kamikaze (…) Nunca se rendirá”
Diosdado Cabello, el ministro torturador
El pasado 27 de agosto, el dictador Nicolás Maduro designó a Diosdado Cabello como el nuevo ministro de Interior, Justicia y Paz. Durante sus primeros 15 días de gestión, se detuvo a Perkins Rocha, vocero y asesor jurídico del Comando con Venezuela y de la líder de la oposición María Corina Machado y, a Biagio Pilieri, dirigente de la oposición, ambas importantes dentro de la Plataforma Unitaria Democrática (PUD).
“Hasta ahora «se sospechaba» que Cabello incidía mucho en todo lo que tuviera que ver con inteligencia y represión. Ahora está en la línea de mando, le responsabiliza directamente. Si la consigna es «morir matando» tú estás a cargo, creo que es el mensaje. Es rudo”, declaró la politóloga Carmen Beatriz Fernández a BBC Mundo.
Con respecto a la última declaración, la Corte Penal Internacional (CPI) abrió una investigación formal contra el gobierno de Nicolás Maduro por posibles crímenes de lesa humanidad. Este nombramiento podría sugerir que el régimen busca la radicalización y el atrincheramiento para mostrar un bloque reforzado y unido, sin importar las etiquetas negativas que puedan surgir.