(Fuente: EFE / Alberto News) La ONG Provea ha denunciado que el Estado venezolano, secuestrado por el régimen de Nicolás Maduro, ha abandonado «abiertamente sus obligaciones» en materia de derechos económicos, sociales y culturales, y que ha habido, según la organización, una «sistemática violación de los derechos a la asociación, manifestación y expresión».

Esta denuncia se hizo por la conmemoración del Día Internacional de la Democracia. «En Venezuela se ha impuesto el empeño gubernamental de consolidar un modelo económico divorciado de los intereses populares, sostenido por la corrupción, la opacidad y el favorecimiento de economías criminales de diversas procedencias», afirmó la ONG a través de su cuenta de la red social X (Twitter).

Provea considera que la adopción de medidas antipopulares y antidemocráticas han erosionado la garantía de los derechos sociales y ilusoria la posibilidad de superar la crisis en el menor tiempo posible.

«La agudización de la crisis y la ausencia de respuestas para superarla obedece, fundamentalmente, al cierre de los espacios democráticos y la extinción del Estado de derecho», expresó Provea.

Con información de EFE

Provea: Las negaciones del régimen de Nicolás Maduro

La organización no gubernamental advirtió que «negar» a las personas «el derecho humano a la democracia y al bienestar» y «reprimir a quien reclame estos principios básicos es un delito contra los DD.HH.».

Por tanto, agregó, «solo en democracia se podrá garantizar que las demandas de justicia y de igualdad de derechos para todas las personas puedan ser escuchadas».

El pasado jueves, un grupo de 49 países, más la Unión Europea (UE), firmaron una declaración conjunta en Naciones Unidas para pedir «restablecer las normas democráticas en Venezuela», aunque no incluyó un llamamiento concreto a la ONU para que intervenga en la crisis.

Los firmantes recuerdan que «es hora de que los venezolanos comiencen discusiones constructivas e inclusivas para resolver el ‘impasse’ electoral», en alusión a los comicios presidenciales del 28 de julio, cuyos resultados oficiales, que otorgan la victoria al mandatario Nicolás Maduro, no han sido reconocidos por gran parte de la comunidad internacional.

Asimismo, esos países se dicen «gravemente preocupados por las denuncias de violaciones a los derechos humanos».

Por su parte, el Gobierno de Maduro dijo este domingo que la democracia en el país caribeño es «protagónica y participativa» y «se traduce en verdadero poder para el pueblo».

En un un mensaje en Telegram compartido por el canciller Yván Gil, el Ejecutivo agregó que «solo a través de la democracia popular» se podrá «garantizar la emancipación y soberanía» de los países.