A pocos días de cumplirse dos meses del regreso de Donald Trump a la Casa Blanca, la política exterior de su segunda administración ha sido impredecible para propios y ajenos al partido republicano, y, por ende, para el resto del mundo que día a día se mantiene a la expectativa sobre cuál será su próximo movimiento y cómo afectará a un sistema multipolar que parece estar llegando a su fin con el acercamiento de EEUU con Rusia.
En estos primeros sesenta días de gobierno, el Presidente Trump se ha referido en muchas oportunidades a Venezuela, y en consecuencia al régimen de Nicolás Maduro, a quien ha calificado como “el enemigo”, que no pretendía seguir financiando bajo el esquema de licencias petroleras a través de la empresa Chevron, que dejaba casi $400 millones mensuales en las arcas financieras del chavismo por transacciones con el crudo venezolano.
Sobre esta impredecible figura de “Trump 2” ha comentado en diversas oportunidades Walter Molina Galdi, politólogo venezolano residenciado en Argentina, especialista en comunicación política y articulista del medio La Gran Aldea, con quien conversamos en Dossier Venezuela para analizar las acciones hasta ahora tomadas por la administración norteamericana para con la causa democrática en nuestro país, y la estrategia de mayor presión que pudiera arreciar sobre Nicolás Maduro en los próximos meses.
– Si bien la política exterior de Donald Trump ha sido bastante incierta, con su atención puesta en los conflictos bélicos de Europa y el Medio Oriente, Venezuela no ha pasado por debajo de la mesa ¿Cómo evalúas estos primeros dos meses de su gobierno, su política hacia Venezuela y su actitud para con el régimen de Maduro?
– Estamos evidentemente ante un presidente que es absolutamente impredecible, en términos generales, quien te diga que sabía exactamente lo que iba a hacer Donald Trump, miente. Se va a centrar en su zona de influencia en América Latina, y en el continente en general, al final, él no quiere tener que ver con los conflictos en Europa, se los dejará a Europa, vemos lo que ocurrió con Ucrania; más allá de su apoyo a Israel, lo que quiere es que se pacifique el Medio Oriente.
En este sentido hay una realidad, si quieres tener una región tranquila, digamos, pacificada, o más o menos estable, hay un problema grave, el régimen de Nicolás Maduro, y es un problema grave porque hay muchos que quieren bajarle el tono y decir que ahí no ocurre nada. Tomando en cuenta que la principal preocupación de Donald Trump es la migración masiva, pues la migración más grande del mundo es la venezolana, más grande que la de Ucrania, más grande que la de Afganistán, más grande que la de Siria, hay como medio millón de venezolanos en Estados Unidos aproximadamente, quieren ir hacia allá los venezolanos además porque hay una situación obviamente compleja en la región, en los demás países.
Segundo, el narcotráfico, el tráfico de oro, de personas y un largo etcétera de delitos, del cual el régimen de Nicolás Maduro es promotor. Y tercero, los grupos terroristas y los grupos criminales como el tren de Aragua. Por ejemplo, en su primer día tras la toma de posesión, Donald Trump habló sobre el tren de Aragua.
– Es decir, ¿Sí se está haciendo algo? Muchos venezolanos debido a los precedentes de muy altas expectativas políticas durante los últimos años tienen una desesperación evidente, no entienden cómo no ha sido suficiente con lo hecho por el madurismo, por ejemplo, con las elecciones presidenciales del 28 de julio, como para que todavía se hable de acercamientos de EEUU con el régimen. El enviado especial de Donald Trump que se dio la mano con Nicolás Maduro, para muchos esa imagen fue devastadora en ese momento, ¿realmente está haciendo algo Donald Trump y su administración para sacar a Nicolás Maduro del poder?
– Donald Trump o los Estados Unidos en general, el FBI, son diferentes organismos, la Unión Europea, los organismos internacionales, la Corte Penal Internacional, la Justicia Argentina que ha actuado en ese sentido y un largo etcétera, son herramientas que debemos usar los venezolanos para lograr el cometido que es la libertad del país. Es decir, no es que Donald Trump va a hacer algo para sacar a Maduro, no es que la Unión Europea va a hacer algo para sacar a Maduro.
Todo eso sirve para romper el esquema que mantiene al chavismo, un esquema que está bastante agrietado. Si lo vemos todo desde el 28 de julio para acá, pareciera que el régimen es invencible, pero no, hay que verlo más hacia atrás. Yo siempre le digo a la gente, recuerden cómo estaba Venezuela en enero del 2023 y miren hasta dónde hemos llegado ahora. Ese muro está agrietado, ahora, todavía no se ha terminado de romper.
Esa imagen de Grenell con Maduro fue terrible evidentemente para los venezolanos, salieron los propagandistas de siempre, “Trump y Maduro van a ser amigos”, olvídate, ya no hay libertad, déjalo así, era lo que querían, sembrar desesperanza. Pero después vimos lo que ha ocurrido hasta ahora, ¿qué ha ocurrido? Marco Rubio ha sido bastante claro, Mauricio Claver-Carone ha sido bastante claro, el encargado del comando sur fue bastante claro en el Senado, habló de narcoterrorismo, que hay que salir del régimen de Nicolás Maduro. Y después vinieron las acciones, se le quitan las licencias petroleras al régimen porque incumplió todos los acuerdos, esa es la razón por la cual se pone final a las licencias.
Ya ese dinero de entrada legal lo pierde el chavismo y esto empieza a golpear a los negocios ilícitos del régimen de Maduro. Cuando dejen de tener este ingreso de dinero, el sistema que se mantiene por ese ingreso empezará a tambalearse y ahí es donde tiene que actuar el liderazgo opositor que no tengo duda que tiene un plan para esto.
– Si ahí en ese tablero entra la oposición como bien lo mencionabas en tu análisis, siendo María Corina Machado quien sigue teniendo todavía la voz de mando, más allá de las divisiones internas de cara a próximos comicios, ¿Edmundo González y María Corina Machado están siendo tomados en cuenta por Donald Trump, está tomando en cuenta lo que es la oposición venezolana para un futuro inmediato?
– Cuando ocurrió el secuestro exprés de María Corina Machado el 9 de enero, Trump no había dicho nada sobre ella hasta ese momento, pero lo hizo, y nombró a Edmundo González, y se refirió a lo que sucede en Venezuela a través de Truth Social, en su red social, y lo dijo claramente, se refirió a María Corina Machado como una líder. Cuando Donald Trump anuncia que van a poner fin a las licencias, lo hace justo cuando María Carolina Machado estaba en un podcast con el hijo de Trump. Y el hijo de Donald Trump para para quienes no saben, tiene una incidencia directa en las decisiones que se toman en EEUU; esas cosas no son casualidades, para nada, nada de esto ocurre como casualidades.
Ese podcast no fue para nosotros los venezolanos, fue para los Estados Unidos, fue para Donald Trump, fue para la opinión pública estadounidense, fue para la política estadounidense y les dijo lo que querían escuchar, porque es la intermediaria directa, la persona con la que hablan es con María Colina Machado, es la líder indiscutida de Venezuela y con quien una vez se logre ir hacia una transición democrática, ojalá por supuesto sea lo más pronto posible, que creo ya tiene bastante avanzado.
El factor María Corina Machado hace una diferencia importante acá, porque es una de las dirigentes que más y mejor entiende que enfrenta a una tiranía, que la llama como tal desde hace muchos años cuando muchos todavía trataban de buscar artificios para decir que era una autocracia competitiva. Es una tiranía que viola derechos humanos, que son unos criminales de lesa humanidad, son unos terroristas; lo que ella ha logrado internacionalmente es la coherencia, unir al país y aún después de 7 meses transcurridos desde el 28 de julio mantiene ese liderazgo que tiene hoy.
– Algunos especialistas en materia internacional sostienen que en este intento de Donald Trump para lograr la paz en Ucrania, puede haber un intercambio que incluya la paz de nuestra región, que pasa por la salida del régimen venezolano. ¿Crees que Venezuela puede ser una pieza de esta negociación con Rusia, uno de los aliados de Maduro, junto con China e Irán; como parte de una entrega donde se pierde parte de Ucrania y Donald Trump se encargue de Venezuela?
– Estas negociaciones no son tan “te entrego esto y tú me das esto” por dos razones principales, no es Donald Trump quien puede entregar a Ucrania, lo vimos con lo que ocurrió con Zelensky en la Casa Blanca, y tampoco es Vladimir Putin el que puede entregar a Venezuela. Sí creo que en algún punto la zona de influencia de Donald Trump va a ser el continente, por ende, se le va a complicar más a Putin darle la mano a Maduro. China también me parece importante porque es el verdadero enemigo de Donald Trump, el que él se impuso como enemigo a derrotar, y China tiene una presencia muy fuerte en Venezuela en términos económicos.
El chavismo tiene una sola cosa que lo mantiene en el poder, las armas, y no hay nada más inestable e inseguro que las armas. Por eso es fundamental que nos mantengamos unidos, que entendamos que estos procesos para lograr una transición no tienen una fecha exacta, puede ocurrir mañana, en una semana, pero está avanzando, internacionalmente va avanzando. Veamos lo que ocurrió con Chevron, que las licencias sean eliminadas empresas estadounidenses quiere decir que también pudieran ser eliminadas a otros países, y eso va a golpear mucho más al chavismo.
Esperen a que el Cártel de Los Soles sea declarado también como organización terrorista, sabemos quiénes son los jefes del este cártel. Hay una serie de cosas que tenemos que entender qué están pasando. Yo creo que la decisión está tomada; en octubre de 2023 con la primaria se dio un principio de revelación, dejamos atrás a todos los que todavía se vendían como oposición, ya estamos muy claros de lo que ocurre y yo creo que esto más allá de un sentimiento. Va a terminar sucediendo una transición a la democracia en Venezuela, pero estos procesos no tienen una fecha exacta, pero la decisión está tomada.