(Fuente: Alberto News) El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, confiesa «no tener información» sobre la decisión del régimen de Nicolás Maduro de suspender las operaciones de la Oficina del Alto Comisionado de Derechos Humanos de la ONU en Venezuela y ordenó a sus 13 funcionarios que abandonen el país en un plazo de 72 horas.
“No tengo información sobre lo que está pasando en Venezuela”, afirmó el mandatario brasileño durante una comparencia de prensa.
La suspensión ocurre en medio de preocupaciones por las violaciones a los Derechos Humanos tras el arresto de la abogada y activista Rocío San Miguel, detenida luego de ser vinculada por una presunta trama para atentar contra la vida de Nicolás Maduro.
Con información de Alberto News
Ravina Shamdasani, portavoz de la Oficina del Alto Comisionado de Derechos Humanos de la ONU, con sede en Ginebra, Suiza, dijo que la agencia lamentó la decisión y está evaluando los próximos pasos.
“Continuamos conversando con las autoridades y otros actores”, afirmó Shamdasani. “Nuestros principios rectores han sido y seguirán siendo la promoción y la protección de los derechos humanos de los venezolanos y las venezolanas”.
Situación actual de Venezuela con respecto a funcionarios de la ONU
El martes la Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas publicó en la red social X, antes conocida como Twitter, que seguía “con profunda preocupación” la detención de San Miguel y destacó que “su paradero sigue siendo desconocido, lo que podría calificar su detención como desaparición forzada” e instó a su liberación inmediata.
Horas antes de las declaraciones del canciller venezolano, la oficina del comisionado publicó también en X que tras las declaraciones de las autoridades venezolanas “tomamos nota de que el lugar de detención de Rocío San Miguel —y por tanto su paradero— ha sido confirmado y cuatro familiares han sido puestos en libertad condicional”.
Insistió en que “deben respetarse las garantías del debido proceso, incluido el derecho a la defensa”.