Amnistía Internacional instó a la Unión Europea (UE) a tomar medidas contundentes frente a la escalada de represión en Venezuela, un año después de las elecciones presidenciales fraudulentas del 28 de julio de 2024. En una carta dirigida a líderes como Ursula von der Leyen y Kaja Kallas, la ONG denunció que el régimen de Nicolás Maduro ha intensificado desapariciones forzadas, detenciones arbitrarias, torturas y ejecuciones extrajudiciales, calificándolos como posibles crímenes de lesa humanidad. Este ataque sistemático contra la población civil, documentado en el informe Detenciones sin rastro, evidencia un régimen que utiliza el terror para silenciar disidentes y mantener el poder.
Desapariciones forzadas: Una Herramienta de represión
El informe de Amnistía documenta 15 casos de desapariciones forzadas entre julio de 2024 y junio de 2025, ocho de los cuales siguen sin resolverse, incluyendo ciudadanos de España y Francia. La ONG señala que el régimen emplea estas desapariciones como “fichas de canje” para presionar a gobiernos extranjeros, como en el caso del franco-estadounidense Lucas Hunter, liberado en un intercambio de prisioneros que incluyó a Alex Saab. Foro Penal reporta 807 presos políticos, con 28 desapariciones forzadas postelectorales, 12 de ellas de extranjeros, según la ONU. La Dirección General de Contrainteligencia Militar (DGCIM) y el SEBIN son señalados como principales responsables.
La represión postelectoral dejó 25 muertos, 2,200 detenciones arbitrarias y más de 200 menores arrestados, muchos torturados para autoincriminarse, según Amnistía. La CIDH denunció un “clima de miedo” con violencia sexual y palizas en centros como El Helicoide, donde presos como Alejandro Rebolledo enfrentan traslados arbitrarios. Leyes como la de ONG y la Ley Simón Bolívar, aprobadas en noviembre de 2024, imponen sanciones de hasta 30 años de prisión, asfixiando a la sociedad civil. Programas sociales, como el sistema CLAP, son usados para controlar a la población, mientras el CNE manipuló los resultados electorales, según la Misión de la ONU.
Cumbre UE-CELAC: Una oportunidad crítica
Amnistía urge a la UE priorizar la crisis venezolana en la Cumbre UE-CELAC del 9 y 10 de noviembre de 2025, exigiendo la liberación de presos como Alberto Trentini y el cese de la persecución a periodistas, con 477 exiliados desde 2018. La UE debe respaldar la investigación de la Corte Penal Internacional y la Misión de la ONU, que concluyen que la persecución política es un crimen de lesa humanidad. Además, debe garantizar protección a los 7.89 millones de migrantes venezolanos, respetando el principio de no devolución. “La UE no puede normalizar esta tragedia”, afirmó Agnès Callamard, secretaria general de Amnistía.
La presión de la UE, que no reconoce a Maduro como presidente legítimo, es crucial ante la fractura interna del chavismo señalada por Gustavo Tovar y la amenaza regional del Cártel de los Soles, según Marco Rubio. La comunidad internacional debe unirse para exigir justicia y apoyar a líderes como María Corina Machado. Como afirmó Callamard, “los venezolanos merecen que su lucha por la verdad y la libertad no sea ignorada”.