El gobierno de Francia anunció este domingo 24 de agosto de 2025 un refuerzo significativo en su lucha contra el narcotráfico en el Caribe, centrándose en el archipiélago de Guadalupe, territorio de ultramar que se ha consolidado como una de las principales rutas de entrada de drogas hacia Europa. El ministro del Interior, Bruno Retailleau, detalló un plan que incluye la asignación de 13 investigadores adicionales para la Oficina Antinarcóticos (Ofast), un laboratorio de análisis balístico, dos escuadrones móviles de gendarmería, dos brigadas náuticas, radares de vigilancia en canales y un dron para monitorear los más de 700 kilómetros de costas. Esta estrategia busca cerrar rutas marítimas utilizadas por organizaciones criminales que han intensificado la violencia en la región.
Guadalupe, ubicada al norte de Dominica y al sureste de Puerto Rico, es un punto estratégico para el tránsito de cargamentos ilegales hacia Europa, según las autoridades francesas. El ministro de Ultramar, Manuel Valls, celebró la decisión, afirmando: “Estos medios masivos envían un mensaje claro a los traficantes: descubrirán que enfrentan a un Estado que nunca retrocede ante la violencia. Estamos decididos a proteger a nuestros compatriotas en todas partes. No permitiremos que la violencia desfigure el rostro de Guadalupe”. Valls enfatizó que el gobierno continuará empleando todos los recursos para defender la integridad del territorio.
Esta ofensiva se produce en un contexto regional marcado por el endurecimiento de la cooperación internacional contra el narcotráfico. Estados Unidos, bajo el liderazgo de Donald Trump, desplegó más de 4,000 soldados en el sur del Mar Caribe, incluyendo destructores como USS Gravely, USS Jason Dunham y USS Sampson, un escuadrón anfibio con buques como USS Iwo Jima, USS San Antonio y USS Fort Lauderdale, y un submarino nuclear clase Virginia, buscando interceptar el tráfico de cocaína desde países como Colombia y Venezuela. En febrero de 2025, Trump designó como grupos terroristas a los carteles mexicanos Jalisco Nueva Generación, Cartel del Noreste, Nueva Familia Michoacana y Cartel del Golfo, así como el Tren de Aragua, el Cartel de los Soles en Venezuela y la Mara Salvatrucha (MS-13) en El Salvador.
Países como Ecuador y Paraguay también acusan al Cartel de los Soles, liderado por Nicolás Maduro según EE. UU., de operar como una estructura delictiva transnacional vinculada al tráfico de drogas, lavado de activos y violencia regional. Maduro, con una recompensa de 50 millones de dólares por su captura, responde con retórica belicista, ordenando armar a 4,5 millones de milicianos y prohibiendo drones, mientras agentes del Sebin y la Dgcim vigilan Caracas en discreción.