(Fuente: El Nacional) Un grupo de manifestantes en La Asunción, Paraguay, liberaron globos blancos como un símbolo para recordarle a la Organización de Estados Americanos (OEA) la existencia de más de 1.600 presos políticos en la región, haciendo alusión a los regímenes de los países Venezuela, Cuba y Nicaragua.
Los manifestantes han aprovechado que la asamblea general 54° de la OEA está instalada en la ciudad sudamericana. «La intención fue llamar la atención a los Estados que se reunieron en la asamblea general para la liberación inmediata e incondicional de los prisioneros políticos en Cuba, Venezuela y Nicaragua», puntualizó, pidiendo que esta condición se agregue a la declaración final del encuentro.
«Si los Estados no levantan la voz por los perseguidos políticos en la región, quién lo van a hacer», cuestionó.
Con información de El Nacional
54ª asamblea general de la OEA
Asunción aloja este año, en la sede de la Conmebol, la 54ª asamblea general de la Organización de Estados Americanos, cuyos diálogos están enfocados en el intento de golpe de Estado del miércoles en Bolivia, pero que aprobó una resolución proponiéndose hacer «seguimiento a la situación en Nicaragua».
Las relaciones del país centroamericano con la comunidad internacional se han tensado desde la represión de las protestas de 2018 contra Daniel Ortega, en el poder desde 2007 y reelegido sucesivamente.
En tanto, en Venezuela, Nicolás Maduro buscará el 28 de julio renovar su mandato por seis años más, en unos comicios muy vigilados por la comunidad internacional y en los que la mayoría de las encuestas dan ventaja a la oposición liderada por María Corina Machado y su candidato, Edmundo González.
Ambos países abandonaron la OEA en los últimos años: Nicaragua el año pasado y Venezuela en 2019, acusándola de ser un «espacio de dominación imperial».
«Hay muchos estados que prefieren callar ante la opresión en estos tres países (…) Nuestro objetivo en esta asamblea general es romper con el silencio cómplice de muchos gobernantes de nuestra región», expresó la militante exiliada en Miami y cuyo padre, Oswaldo Payá, un opositor al régimen de Fidel Castro, fue encontrado muerto en la isla en extrañas circunstancias hace 10 años.
«No es posible que si hay un sistema interamericano que tiene mecanismos para presionar, o al menos para promover y defender la democracia de los pueblos, eso no se use contra los dictadores que están en el poder», dijo Rosa María Payá.
«Normalizar el régimen cubano ha traído como consecuencia que hoy ya no haya una dictadura. Ahora son tres. No se podría explicar la dictadura instalada en Venezuela y Nicaragua sin la injerencia del régimen cubano», añadió.