El cardenal venezolano Baltazar Porras ha alzado su voz por la liberación de los presos políticos, desde la Universidad Lateranense, en la víspera de la canonización del doctor José Gregorio Hernández y la madre Carmen Rendiles,

“Tal como lo ha señalado reiteradamente la Conferencia Episcopal Venezolana, vivimos en una situación moralmente inaceptable”, afirmó Porras, al enumerar los males que aquejan al país: “la merma del ejercicio de la libertad ciudadana, el crecimiento de la pobreza, la militarización como forma de gobierno que excita la violencia, la corrupción y la falta de autonomía de los poderes públicos”.

El representan eclesiástico ha advertido que el panorama “no ayuda a la convivencia pacífica ni a superar las carencias estructurales de la sociedad”, y sostuvo que figuras como José Gregorio Hernández “se convierten en un ícono que amalgama a todos en nuestra sociedad más allá de las diferencias”.

Con información de Monitoreamos

Porras también dedicó parte de su discurso a los migrantes venezolanos, señalando que deben ser “acogidos, protegidos, promovidos e integrados” porque “cada ser humano es hijo de Dios, portador de la imagen de Cristo”.

Finalmente, hizo un llamado a no olvidar a los presos políticos, víctimas de detenciones arbitrarias que destruyen familias: “Privados de libertad por razones no siempre claras, se rompe la unidad familiar y sufren todos sin que haya a quien reponer.”

El cardenal concluyó su intervención apelando a la esperanza en medio de la adversidad: “Es una ocasión que la Providencia nos ofrece para contribuir a la construcción de una sociedad más justa, una democracia más plena y un país más solidario.”