El Comité por la Libertad de los Presos Políticos de Venezuela (Clippve) exigió la libertad plena e inmediata para todos los presos políticos venezolanos, tanto dentro del país como en el exterior, y rechazó el uso propagandístico de sus casos por parte de gobiernos e instituciones. La organización emitió un enérgico comunicado a través de su cuenta en la red social X (antes Twitter), donde repudia la instrumentalización del sufrimiento de las víctimas y de sus familiares con fines políticos.

La postura del Clippve surge en respuesta a la propuesta de canje humanitario realizada por el presidente de El Salvador, Nayib Bukele, quien planteó intercambiar a 252 migrantes venezolanos detenidos en el Centro de Confinamiento del Terrorismo (Cecot) por un número equivalente de presos políticos encarcelados en Venezuela.

“Reiteramos nuestra condena a la detención y deportación sin debido proceso de venezolanos desde Estados Unidos al Cecot en El Salvador. Todos aquellos que hayan cometido delitos en EE. UU. deben ser devueltos a ese país y sometidos a un proceso judicial justo”, señaló la organización en su pronunciamiento.

Libertad sin condiciones y respeto a los derechos humanos

Clippve hizo énfasis en que todos los venezolanos detenidos en el Cecot, cuyas familias y organizaciones de derechos humanos han demostrado su inocencia, deben ser liberados de manera inmediata y sin condiciones, al igual que los presos políticos dentro del país, quienes —según cifras del Foro Penal— superan los 890 casos de detención arbitraria en Venezuela.

“La libertad no puede convertirse en una ficha de negociación ni en un recurso propagandístico”, advirtió la organización. “No se puede jugar con el sufrimiento ni utilizarlo para invisibilizar las condiciones inhumanas en las que se mantiene a los presos políticos”.

Repudio a la estigmatización de migrantes venezolanos

La ONG también repudió la estigmatización de la migración venezolana a raíz de la narrativa que vincula a migrantes con bandas delictivas como el Tren de Aragua, lo cual ha sido utilizado por algunos gobiernos para justificar deportaciones sin el debido proceso.

En este sentido, Clippve denunció la falta de coherencia del Ministerio Público venezolano, que mientras exige la liberación de los detenidos en El Salvador, ignora los derechos de los presos políticos dentro del país.

“Rechazamos la estigmatización de la migración venezolana, así como la falta de garantías por parte del Ministerio Público, ente que debería velar por los derechos individuales y procesales de todos los ciudadanos”, expresó la organización.

La propuesta de Bukele, que incluye nombres como Rafael Tudares Bracho (yerno del presidente electo Edmundo González Urrutia), la activista Rocío San Miguel y el periodista Roland Carreño, ha sido calificada como “cínica” e “inadmisible” por el régimen de Nicolás Maduro, que acusa a El Salvador de mantener a venezolanos “secuestrados” y utilizados como moneda de cambio.

No obstante, desde organizaciones como Clippve se cuestiona la doble moral del gobierno venezolano, que exige garantías para los migrantes deportados, pero mantiene en condiciones inhumanas a decenas de disidentes, activistas y militares detenidos por razones políticas.

Llamado a la unidad nacional y a la comunidad internacional

El Clippve exhortó al país a unificarse en torno a la exigencia de libertad plena para todos los presos políticos, y pidió a la comunidad internacional que promueva alternativas honestas y coherentes que ayuden a superar la crisis de derechos humanos en Venezuela.

“Reconocemos que históricamente han existido diversas vías para alcanzar la libertad de quienes han sido detenidos por razones políticas. Pero ninguna de ellas puede justificarse si pasa por la humillación, la manipulación o la impunidad”, finalizó el comunicado.

El pronunciamiento del Clippve refleja una vez más el clamor de cientos de familias venezolanas, que enfrentan no solo la incertidumbre y el dolor de la separación, sino también un sistema represivo que convierte la justicia en un mecanismo de persecución y chantaje político.