Diversas organización de Derechos Humanos han exigido la liberación inmediata del periodista y editor de La Patilla, Rory Branker, quien cumple 250 días secuestrado en las celdas de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) en Boleíta, Caracas.
Ha solicitud se volvió a producir luego del fallecimiento de su hermano, Erman Branker, quien era su principal apoyo y el encargado de llevarle alimentos.
El Observatorio Venezolano de Prisiones (OVP) ha denunciado la «grave situación humanitaria» que atraviesa el periodista, secuestrado desde hace ocho meses y recordó que su madre de 80 años, tiene complicaciones de salud que le impiden visitarlo.
«La madre de Rory tiene 80 años y complicaciones de salud, propias de la edad, que le impiden tomar la batuta de su hijo preso de forma injusta. Además, la familia no quiere exponerla a la crueldad del sistema, con requisas vejatorias y todo lo que implica visitar a una persona privada de libertad en unos calabozos como la PNB de Boleíta, donde las violaciones a los derechos no cesan a pesar de las denuncias públicas», expone el OVP.
Por su parte, Justicia, Encuentro y Perdón (JEP) advirtió que Rory Branker permanece sin acceso a una defensa legal y en condiciones que ponen en riesgo su integridad física y psicológica.
«Desde nuestra organización hacemos un llamado urgente a las autoridades a que revisen el caso de Rory y tomen medidas cautelares que le permitan recuperar su libertad, garantizar su derecho a la defensa y proteger su dignidad y la de su familia. Mantenerlo detenido en estas condiciones prolonga la injusticia y multiplica el sufrimiento de quienes lo aman», indica el mensaje de JEP.
Ambas organizaciones instaron al fiscal general del régimen, Tarek William Saab, iniciar una investigación por notitia criminis sobre las violaciones a los derechos humanos que se cometen en los calabozos de la PNB en Boleíta, además de adoptar medidas urgentes para reducir el hacinamiento y la corrupción en esas instalaciones.











