El régimen de Nicolás Maduro continúa su campaña de represión contra voces disidentes en Venezuela, manteniendo a más de 1,000 presos políticos en condiciones inhumanas. Entre ellos, Perkins Rocha, asesor jurídico de María Corina Machado, lleva casi un año detenido arbitrariamente en El Helicoide, un centro conocido por torturas y violaciones de derechos humanos.
Su caso es un símbolo de la lucha por la verdad y la libertad en un país asfixiado por el autoritarismo. Santiago Rocha, hijo de Perkins, denunció en NTN24 que, aunque el régimen excarceló a menos de 100 presos políticos, “faltan más de 1,000” por liberar, incluido su padre.
La opacidad en los criterios de estas liberaciones, según Santiago, evidencia la arbitrariedad del régimen de Maduro. Perkins, de 62 años, sufre graves problemas de salud, incluyendo válvulas en el cerebro y tubos que llegan al estómago, lo que agrava la urgencia de su liberación.
El abogado fue detenido el 27 de agosto de 2024, días después de las elecciones presidenciales donde Maduro se autoproclamó ganador en medio de denuncias de fraude. La oposición, respaldada por el 83,5% de las actas electorales, sostiene que Edmundo González Urrutia venció legítimamente. Perkins, acusado de difundir estas actas, permanece incomunicado, sin acceso a defensa privada ni visitas familiares, en una clara violación del debido proceso.
Santiago Rocha reveló que no han tenido contacto con su padre desde su detención, ni siquiera a través de la defensora pública asignada por el Estado, a quien también se le niega acceso. “Ya hay precedentes de muertes en centros de tortura”, advirtió, señalando el riesgo mortal que enfrentan los presos políticos. Organizaciones como Foro Penal reportan que, hasta marzo de 2025, 1,060 personas permanecen detenidas por motivos políticos, incluyendo 66 extranjeros y adolescentes
El Comité de Derechos Humanos de Vente Venezuela, liderado por María Corina Machado, calificó la detención de Rocha como un “castigo por exigir justicia y libertad”. Su esposa, María Costanza Cipriani, denunció que se le ha negado el derecho a una defensa privada, manteniéndolo en aislamiento. Estas prácticas, documentadas por Human Rights Watch, incluyen torturas, malos tratos y desapariciones forzadas, configurando crímenes de lesa humanidad
La Puerta Giratoria de la Represión
A pesar de liberaciones parciales, como las 59 reportadas por Justicia, Encuentro y Perdón en julio de 2025, el régimen de Maduro aplica una “puerta giratoria”: libera a algunos mientras detiene a otros. El Comando Con Venezuela denunció que, tras las excarcelaciones, se arrestaron al menos 12 opositores en 72 horas, incluyendo a Manuel Ferreira, jefe de campaña en Lara. Esta estrategia busca mantener el control mediante el miedo, mientras la comunidad internacional, incluyendo la CPI, investiga a Maduro por crímenes de lesa humanidad
Las liberaciones, a menudo mediadas por acuerdos políticos como el canje con EE.UU. por 252 migrantes venezolanos, no garantizan justicia. Los excarcelados enfrentan medidas cautelares que los obligan a guardar silencio sobre los abusos sufridos, y muchos siguen procesados por cargos de “terrorismo”. Foro Penal y otras ONG critican la falta de transparencia en estas cifras, exigiendo listas oficiales para verificar las liberaciones
El Clamor por Justicia
La detención de Perkins Rocha no es solo un ataque personal, sino un intento de silenciar la resistencia venezolana. Su familia y la oposición exigen su libertad inmediata, junto con la de todos los presos políticos. La comunidad internacional debe intensificar la presión sobre Maduro, apoyando a la CPI y sancionando a los responsables de estas atrocidades. La lucha de Rocha y de miles de venezolanos es un recordatorio: la verdad no puede ser encarcelada, y la libertad es un derecho innegociable.