El secretario de Estado de los Estados Unidos, Marcio Rubio, ha asegurado que el despliegue militar en el Caribe contra los carteles de droga «ha funcionado y seguirá funcionando», además defendió la permanencia de la operación enfocada en el Cartel de los Soles, organización que es liderada por Nicolás Maduro, según denuncias del país norteamericano.

Rubio insistió que es la única manera de frenar las organizaciones criminales y narcotraficantes es impedir que las embarcaciones salgan de la región con destino a las costas de Estados Unidos.

“La interdicción no funciona. No les importa perder un barco ni perder drogas, ya lo han contemplado en su modelo de negocio. Lo que los detiene es que sepan que no van a completar el viaje”, advirtió el funcionario estadounidense en una entrevista con CBS Mornings.

El funcionario también calificó estas operaciones como un asunto de seguridad nacional al señalar que los cargamentos de narcóticos representan una «amenaza inminente» para los ciudadanos en Estados Unidos.

“Un barco lleno de drogas rumbo a Estados Unidos es tan peligroso como si un país viniera a atacar una ciudad estadounidense. Hay que detenerlo”, afirmó.

Marco Rubio asegura que el despliegue ya ha dado resultados

Según Rubio, la presencia naval ya ha tenido efectos visibles en la ruta del narcotráfico.

“No estás viendo tantos barcos ahora como hace un par de semanas. El presidente ha sido muy claro: no permitirá que estos carteles inunden a Estados Unidos con drogas venenosas que están matando a nuestra gente”, expresó.

Estados Unidos ha confirmado hasta la fecha el ataque contra cuatro embarcaciones vinculadas al narcotráfico en aguas del Caribe, al menos tres de ellas presuntamente procedentes de Venezuela.

Washington mantiene desplegados al menos 8 buques de guerra, un submarino de ataque rápido y más de 4.500 efectivos en la región, además de aviones F-35 en Puerto Rico.

Mientras tanto, figuras como la gobernadora puertorriqueña Jenniffer González respaldan la operación. Incluso llegó a afirmar que entregaría a Maduro a las autoridades estadounidenses si estuviera dentro de sus posibilidades y que reclamaría la recompensa de 50 millones de dólares que ofrece el gobierno estadounidense.