El Observatorio Venezolano de Finanzas (OVF) reveló que durante el primer trimestre de 2025, las remuneraciones reales de los trabajadores en el sector comercio y servicios del sector privado registraron una caída de 1,4% en bolívares constantes respecto al mismo período del año anterior. Este retroceso marca el fin de la débil recuperación salarial observada en los últimos tres años, en un contexto económico caracterizado por una inflación persistente y una fuerte depreciación del bolívar.
A pesar de los aumentos nominales otorgados por las empresas privadas, el alza de precios —tanto en bolívares como en dólares— ha erosionado rápidamente los ingresos, dejando a la mayoría de los trabajadores por debajo del umbral necesario para cubrir la canasta básica alimentaria.
Ingresos que no cubren lo básico
Según el OVF, el ingreso mensual promedio en el sector comercio y servicios fue de 237 dólares, aunque con marcadas diferencias según el nivel ocupacional:
- Gerentes: 531 USD
- Profesionales y técnicos: 340 USD
- Obreros y operarios: 217 USD
Estas cifras revelan que más del 70% de los trabajadores en Caracas no logra cubrir el costo mensual de la canasta alimentaria, estimado en aproximadamente 400 dólares por organizaciones independientes.
La situación es aún más dramática para trabajadores del sector público, donde la política de contención salarial del régimen de Nicolás Maduro ha profundizado la brecha con respecto al sector privado formal, sin reajustes salariales estructurales y con ingresos oficiales que rondan apenas 1,60 dólares mensuales como salario mínimo base, sin incluir bonos eventuales.
Dólares que ya no rinden
Uno de los hallazgos más significativos del informe es que el poder adquisitivo en dólares también ha disminuido, desmintiendo la percepción generalizada de que los ingresos dolarizados están protegidos frente a la inflación.
El OVF destaca que el alza de precios en bienes y servicios en dólares ha reducido la capacidad de compra real, haciendo que el deterioro del salario no se limite a quienes cobran en bolívares.
“La inflación en Venezuela también afecta las transacciones en divisas, lo que demuestra que la dolarización de facto no es suficiente para preservar el poder adquisitivo”, señala el informe.
Disparidades regionales: aún peor fuera de Caracas
El estudio también muestra que la situación salarial es más precaria fuera de la capital, donde los ingresos son notablemente más bajos. Las cifras del primer trimestre reflejan la siguiente media mensual por estado:
- Anzoátegui: 92 USD
- Nueva Esparta: 195 USD
- Zulia: 230 USD
Estas cifras evidencian no solo una profunda desigualdad regional, sino también las limitadas herramientas de resistencia económica que tienen los trabajadores del interior para hacer frente a la inflación, el aumento del costo de vida y la precarización del empleo.