La líder opositora venezolana María Corina Machado publicó este jueves en sus redes sociales un video de casi cuatro minutos titulado «Venezuela Tierra de Gracia», en el que describe la «Venezuela que viene» tras la recuperación de la democracia, enfatizando que «el momento es ahora».

En su cuenta de X, Machado expresó: «¡Esta es la Venezuela que viene! Aquí puedes ver, en solo cuatro minutos, el sueño de millones de ciudadanos que ya estamos listos para el retorno de la democracia y un auge económico y social nunca antes visto en la historia de nuestro país». Subrayó que «la transición ya empezó» y preguntó a sus seguidores: «¿Tú qué harás en esa Venezuela? Escribe en los comentarios dónde y qué te ves haciendo. #VenezuelaTierraDeGracia».

El video comienza con imágenes de una Venezuela destruida por la mala gestión del chavismo, pero luego muestra un futuro esperanzador con la recuperación de la democracia. Machado destaca que Venezuela es «una economía destrozada con un potencial inigualable» y afirma que el retorno de la democracia abrirá «una de las oportunidades de inversión más extraordinarias en el mundo emergente».

Describe a Venezuela como un «puente natural estratégico» entre América del Sur, el Caribe y el mundo, a solo 1.200 millas náuticas de Estados Unidos, con acceso directo al canal de Panamá y a Europa, y con las reservas probadas de petróleo más grandes del planeta.

«Venezuela no solo es rica en recursos, es rica en potencial», asegura.

Machado menciona la infraestructura que una vez impulsó una de las economías más avanzadas de América Latina, ahora en colapso, pero con millones de venezolanos «impulsados por la esperanza» exigiendo un cambio democrático.

Anticipa «una oportunidad extraordinaria», con una nación rica en activos, respaldada por una diáspora de más de ocho millones de venezolanos capacitados y resilientes, y el potencial de triplicar el PIB en poco más de una década. Destaca ventajas como costos ultrabajos de extracción de petróleo, capacidad de refinación existente, vastas reservas de gas natural, potencial minero sin explotar, una costa caribeña de 2.800 kilómetros ideal para el turismo, y tierra agrícola fértil para alimentar mercados regionales y globales.

Como sectores clave, menciona el fintech, la logística, la atención médica privada, la educación y los servicios digitales, afirmando que «los primeros en actuar no solo competirán, sino que definirán las industrias del mañana». Concluye que los venezolanos creen en la democracia, la libertad y una nueva era de renovación económica, construida sobre el Estado de derecho, la protección de la propiedad privada, una moneda estable y un marco acogedor para la inversión privada.

«Para los inversores globales, la oportunidad es única: ser socios en este mercado de oportunidades sin igual y compartir su crecimiento. El momento es ahora. Venezuela, una nación para invertir, un mercado para construir, un futuro para crear», finalizó.