Se autodenominan socialistas, pero las denuncias de silencio y persecución política a las mujeres en Bolivia no cesan. El Movimiento al Socialismo (MAS) es señalado por acosar y minimizar el rol de la mujer en la política. Esta es una situación que, según las críticas, se asemeja a lo ocurrido en otros países de la región, como es el caso de Venezuela.
El ejemplo más visible de silencio y persecución política es el de la expresidenta Jeanine Áñez. Tras asumir el cargo de forma provisional en 2019, luego de la renuncia de Evo Morales, Áñez fue detenida y condenada a 10 años de prisión.
- El Ministerio Público de Bolivia la acusó de terrorismo, sedición y conspiración.
- La Procuraduría General la inculpó por incumplimiento de deberes y resoluciones contrarias a la Constitución.
- En julio de 2021, la fiscalía incluso añadió el delito de genocidio a las acusaciones.
El proceso contra Áñez es sido criticado porque se le juzga como a una persona ordinaria, sin los beneficios que usualmente se otorgan a exmandatarios. Muchos lo consideran un acto de persecución política.
Bolivia aplica el mismo patrón de terrorismo que Venezuela
Otros casos de acoso, silencio y persecución política en Bolivia
El patrón de acoso no se detiene en Áñez. Otras figuras femeninas de la política boliviana han levantado la voz para intentar romper el silencio y persecución política
- Eva Copa: La alcaldesa de El Alto retiró su candidatura presidencial en julio de 2025, alegando «acoso político» y presiones internas. Era la única mujer con aspiraciones presidenciales para agosto de 2025
- Roxana Lizarraga: Exministra de Comunicaciones, que sirvió en el gobierno de Áñez, pidió refugio en Perú tras recibir amenazas y amedrentamiento por parte del MAS. Era posible víctima de detención arbitraria.
Organizaciones que denuncian la violencia política de género
La situación fue documentada por diversas entidades, tanto nacionales como internacionales:
- La Asociación de Concejalas de Bolivia (ACOBOL) ha registrado cientos de casos de acoso y violencia política. Solo en 2023 sumaron 110 casos contra alcaldesas y concejalas, incluyen presiones, amenazas, agresiones y coacciones para que las mujeres renuncien a sus cargos.
- Organismos como Amnistía Internacional, la Organización de Estados Americanos (OEA) y la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) se han pronunciado sobre la falta de derechos y la persecución contra Jeanine Áñez y las mujeres que formaron parte de su gobierno.
Este patrón de amedrentamiento y falta de equidad de género evidencian un problema que no solo afecta a Bolivia. Los mismo se repite en otros países con gobiernos de corte socialista.