El presidente del Consejo Nacional Electoral, Elvis Amoroso, sin aportar mayores detalles, salvo que fue una solicitud de factores políticos participantes, anunció que las elecciones regionales y parlamentarias que se harán de manera conjunta cambiarán de fecha: ya no se realizarán el 27 de abril sino el 25 de mayo.
#EspecialDossier || 🚨 ¡Cambio de fecha! El régimen aplaza las elecciones en medio del caos y la desconfianza 🚨
— Dossier Venezuela (@DossierVzla) February 24, 2025
📅 Los comicios parlamentarios y regionales ya no serán el 27 de abril, sino el 25 de mayo.
💬 ¿Por qué este cambio de última hora?
🔍 Sin resultados oficiales del… pic.twitter.com/E6uNdfm0Zw
En este sentido, el régimen continúa con su intención de hacer un proceso electoral para votar por alcaldes, gobernadores, concejos municipales y parlamento nacional el mismo día, tres eventos que deben ser convocados cada uno de ellos según la ley, en un lapso no menor de seis meses, por lo que técnicamente el anuncio no tiene factibilidad técnica pese a que fue postergado 28 días.
Importante recordar que esta apresurada convocatoria se hizo aún sin haberse publicado resultados finales de la elección presidencial, sin página web oficial del ente comicial y sin que se aclarase qué pasó con el supuesto “hackeo” al sistema automatizado del CNE, tres elementos que generan mayor desconfianza en el electorado.
“No hay por ningún lado información de los resultados presidenciales de manera detallada mesa por mesa, no se hicieron las auditorías de cierre con la participación de todos los actores políticos y por supuesto esto arroja dudas y deja desconfianza sobre el CNE” comentó para Dossier Venezuela Luis Lander, director del observatorio electoral venezolano.
Participación existencial: El dilema de la oposición después del 28J
Si bien el régimen madurista es el primer interesado en pasar la página del fraude electoral perpetrado el 28 de julio, diversos analistas políticos sostienen que quienes desde la acera de al frente pretendan participar en los comicios convocados ahora para el mes de mayo, pudieran estar condenados a desaparecer de la vida política del país.
“Si el tema del 28 de julio no se resuelve con el reconocimiento de quien ganó la elección, la vida político electoral se acaba no solo para María Corina Machado sino también para los partidos políticos que están luchando por la democracia” enfatizó el profesor universitario Benigno Alarcón, en el supuesto escenario en que la coalición que respaldó a Edmundo González Urrutia decida participar en los próximos comicios.
Importante destacar que casi en simultáneo al anuncio del CNE, la Plataforma Unitaria Democrática emitió un comunicado en el que pone una serie de condiciones para aceptar ir a los comicios, tales como el respeto a los resultados del 28 de julio, a la vigencia de la tarjeta de “la manito” y la liberación de los presos políticos; comunicado que fue respaldado por la líder María Corina Machado, aún en clandestinidad.
“Siempre habrá diferencias, nunca habrá una concertación perfecta, pero con el hecho de que la Plataforma Unitaria haya puesto su tarjeta para que Edmundo González haya sido candidato y después de todo lo que ha pasado se mantengan relativamente unidos, apunta a cierto nivel de concertación” recalcó Alarcón, director del Centro de Estudios Políticos y de Gobierno de la UCAB.
Sin embargo, una parte de la dirigencia está a favor de acudir a las urnas, como en el caso de Un Nuevo Tiempo, cuyo líder es el gobernador del estado Zulia, Manuel Rosales; así como también lo manifestó el partido Movimiento Progresista de Venezuela y una parte de Primero Justicia representada por el excandidato presidencial Capriles Radonski; mientras otra ala de esta coalición está totalmente negada a postular candidaturas, caso Encuentro Ciudadano, La Causa R y otra ala de PJ que encabeza Juan Pablo Guanipa, también en clandestinidad.
¡A por las migajas…!
A pesar que ocho de diez partidos de la mayor coalición opositora están de acuerdo en no participar bajo estas condiciones, algunas de estas mencionadas facciones políticas que respaldaron a la opción democrática están considerando la posibilidad de participar en los comicios convocados por el régimen bajo la teoría de la “preservación de espacios”, un escenario que según algunos expertos en materia política es un cheque en blanco y sin garantías:
“Deberán admitir cualquier tipo de resultados que no se publiquen en la página del CNE, que no existe, ni que haya la posibilidad de validad los resultados a través de las actas y por lo tanto quien ejerce el poder pueda colocar a quien le dé la gana y donde le dé la gana, es la disposición a recoger migajas…” puntualiza para Dossier Venezuela el politólogo Nicmer Evans.
Además de los históricos, pero hoy muy cuestionados dirigentes de oposición Henrique Capriles Radonski y Manuel Rosales, la denominada Alianza Democrática de partidos que en su mayoría hacen vida en la Asamblea Nacional controlada por el régimen, participarán en los comicios de manera incondicional como en otras tantas veces desde el año 2020 cuando fueron identificados como “El alacranato”, por ser una oposición cooptada por Maduro para restarle fuerza en el parlamento al reconocido para entonces como Presidente interino de Venezuela, Juan Guaidó.
“Aquí lo que hay es actores que sencillamente juegan el juego del régimen con la esperanza de tener un curul, una alcaldía o gobernación. Inclusive dentro de la Plataforma Unitaria siempre habrá actores que jugarán a ello, y si no los hubiese, el gobierno los fabricaría” puntualiza Benigno Alarcón.
A todas estas no es la primera vez que se adelantan o atrasan comicios según la conveniencia política del madurismo. En 2018 la Asamblea Nacional Constituyente y no el CNE, decidió que las elecciones presidenciales debían convocarse a más tardar el 30 de abril, luego se fijaron para el 20 de mayo. En 2024, las presidenciales se adelantaron para el mes de julio.
En 2017, la misma constituyente fijó elecciones de gobernadores y se realizaron el 15 de octubre, pero sin la elección de los Consejos Legislativos. Las elecciones de alcaldes también se hicieron ese año, pero el 10 de diciembre, mientras que la de los concejos municipales se movieron para el 9 de diciembre de 2018. De esta manera los concejales elegidos en 2013 vieron extendido su mandato de cuatro años, un año más.