(Fuente: Infobae / Alberto News) El periodista y defensor de Derechos Humanos, Carlos Julio Rojas, ha cumplido un año detenido arbitrariamente en Venezuela. La ONG Espacio Público denunció que sus condiciones desde el arresto han sido deplorables, atropellando su derecho a la defensa privada, su causa judicial no avanza y se encuentra en una situación de «gravedad» y «riesgo irreparable».

“Ha sido un año fatal”

Francy Fernández, activista social, narró que este año fue fatal en todos los aspectos: emocional, económico y psicológico. Lo visita al menos tres veces por semana, aunque en una ocasión le suspendieron ese derecho por tres semanas, como represalia por insistir en el respeto a sus derechos.

“Ha sido un año de confrontación constante con los funcionarios que lo custodian. Les he pedido que lo alejen de su agresor, que también está detenido en ese mismo lugar. Esa persona inculpó a Rojas difundiendo un video con toda esta infamia que armaron, solo para dañarlo y hacerlo preso del Estado”, denunció la esposa del comunicador.

Con información de Infobae

El relato de Fernández, abogada de profesión, describe el impacto emocional y económico de este año de encierro. “Él asegura ser un preso de conciencia y que está allí por una lucha, por defender derechos humanos y también por ser periodista”, dijo; al tiempo que añadió: “Carlos Julio lo que ha hecho es recordarle al Estado qué está bien y qué no”.

La acusación contra el periodista incluye presuntos delitos de terrorismo y tentativa de magnicidio, supuestamente por haber estado presente en una marcha en febrero de 2024; y por, según el régimen, haber recibido dinero de la dirigente opositora María Corina Machado. “Eso es totalmente falso”, expresó su esposa.

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El periodista ya había sido arrestado anteriormente. En 2017, estuvo preso en la cárcel militar de Ramo Verde, de la que salió con medidas cautelares.

Su compañera recordó que, una hora después de su más reciente detención, recibió una llamada: “Me dijeron que me enviarían los pasajes (a otro país), pero no quise irme. Decidí acompañarlo en esta lucha, hasta lograr verlo en libertad”, relató.

Y siguió: “No lo voy a dejar solo. No es el momento para salir corriendo. Decidí quedarme porque cuando comencé con Carlos Julio dije que esta era yo, y estoy fortalecida al igual que él”.