El Departamento de Justicia de Estados Unidos anunció este lunes acusaciones formales contra 27 personas presuntamente vinculadas al Tren de Aragua, por delitos que incluyen conspiración para crimen organizado, tráfico de drogas, prostitución forzada, robo y extorsión. De los 27 señalados, 21 ya se encuentran bajo custodia federal, mientras que seis permanecen prófugos.

Los operativos para capturar a los sospechosos se realizaron en Nueva York y otras jurisdicciones del noreste, en un esfuerzo coordinado entre agencias federales, locales y estatales.

El Tren de Aragua no es solo una pandilla callejera; es una organización terrorista altamente estructurada que ha destruido familias estadounidenses con violencia brutal”, afirmó la fiscal estadounidense Pamela Bondi, al anunciar los cargos.

Detalles de la operación y los cargos

La investigación, considerada una de las más amplias hasta ahora contra esta banda criminal en territorio estadounidense, ha revelado una red delictiva extendida que operaba en varios estados. El fiscal federal interino del Distrito Sur de Nueva York, Matthew Podolsky, señaló que los acusados están vinculados con asesinatos, tiroteos, tráfico de drogas sintéticas como el “tusi” —una sustancia en polvo rosa altamente adictiva—, así como con extorsiones a pequeños negocios y prostitución forzada de mujeres jóvenes venezolanas.

Entre los nombres más notorios incluidos en la acusación se encuentran:

  • Jarwin Valero Calderón, alias La Fama, de 29 años
  • Samuel González Castro, alias Klei, de 28
  • Eferson Morillo Gómez, alias Jefferson o Efe Trébol, de 20
  • Brayan Oliveros Chero, de 28
  • Sandro Oliveros Chero, de 25
  • Armando José Pérez González, alias Biblia, de 30 años

Todos enfrentan múltiples cargos federales que podrían conllevar penas de cadena perpetua si son hallados culpables.

Trump endurece postura y cuestiona a la Corte Suprema

El anuncio se produce en el marco de la campaña de mano dura contra la migración criminal del presidente Donald Trump, quien ha declarado al Tren de Aragua como una organización terrorista. Este lunes, Trump volvió a arremeter contra los tribunales federales por bloquear sus intentos de deportar masivamente a inmigrantes bajo la Ley de Enemigos Extranjeros de 1798, utilizada como base para las recientes expulsiones.

“Los tribunales no me dejan sacar a los criminales del país”, protestó Trump, haciendo referencia al fallo de la Corte Suprema del fin de semana que suspendió la deportación de 50 venezolanos detenidos en un centro migratorio en Texas, considerados por su administración como integrantes del Tren de Aragua.

El fallo judicial ha congelado temporalmente la estrategia de deportaciones aceleradas, que había sido una de las banderas más controversiales del actual mandatario, generando reacciones tanto de apoyo como de preocupación por la estigmatización de la diáspora venezolana.

Un perfil internacional de violencia

El Tren de Aragua, originado en la prisión venezolana de Tocorón, ha sido vinculado por agencias de seguridad a delitos que van desde tráfico de personas, sicariato y lavado de dinero, hasta extorsión, minería ilegal y contrabando transfronterizo, operando actualmente en más de 10 países del continente, según informes de inteligencia.

En Estados Unidos, la narrativa oficial ha presentado a la organización como la mayor amenaza de seguridad criminal migratoria, pero organizaciones de derechos humanos han advertido sobre el uso político de estas acusaciones, señalando que muchos migrantes han sido injustamente asociados al grupo sin evidencia judicial clara.