Una grave crisis diplomática y política se ha desatado en la embajada de Venezuela en México, luego de la detención en Caracas de al menos cinco funcionarios diplomáticos, entre ellos el segundo secretario Aldo Perfetto Alexandrow, a manos de la Dirección General de Contrainteligencia Militar (DGCIM). Las detenciones se producen tras una purga interna liderada por la embajadora Stella Marina Lugo Betancourt de Montilla, exgobernadora chavista y figura cercana al círculo de poder de Diosdado Cabello.
Información de Sebastiana Barráez
También fueron arrestados Benedicto Alvarado (administración), Yaimara Giménez (consejera comercial), Gustavo Sánchez y Jairo Ramírez (primer y segundo secretario), todos ligados al equipo del exembajador y comandante del 4F Francisco Arias Cárdenas, quien ocupó la jefatura diplomática en México entre 2019 y 2024.
La supuesta razón oficial para estas detenciones es un presunto desfalco de seis millones de dólares en trámites migratorios cobrados en criptomonedas, un mecanismo informal y opaco que ha sido utilizado por varias sedes diplomáticas venezolanas en el mundo. Sin embargo, fuentes cercanas a la embajada aseguran que la verdadera motivación es una pugna interna dentro del PSUV, marcada por tensiones entre facciones encabezadas por Cabello y Arias Cárdenas.
Detenciones arbitrarias y desaparición forzada
Uno de los casos más alarmantes es el de Aldo Perfetto Alexandrow, funcionario de carrera. Según informantes, fue arrestado sin descender del avión que lo traía desde México el pasado 21 de marzo, mientras trasladaba una valija diplomática. “Lo esposaron dentro del avión. Estuvo desaparecido durante más de 15 días sin que su familia recibiera información alguna”, denunció una fuente a Infobae.
El resto del personal, arrestado el 1 de marzo, fue inicialmente trasladado a la sede militar de la ZODI Zulia y luego recluido en El Peñón, una prisión de alta seguridad en Caracas.
Stella Lugo y un historial de controversias
La embajadora Stella Lugo de Montilla no es diplomática de carrera ni cuenta con estudios acreditados en relaciones internacionales. Su trayectoria ha estado marcada por acusaciones de corrupción y vínculos con redes de lavado vinculadas al narcotráfico caribeño. En 2019, fue rechazada como embajadora en Argentina por el entonces presidente Alberto Fernández, y solo fue reconocida en 2022. En México también enfrentó resistencias diplomáticas, que se habrían resuelto tras la intervención del presidente colombiano Gustavo Petro, quien intercedió ante Claudia Sheinbaum, presidenta de México.
Una fuente consultada señaló que Lugo impuso en la embajada a familiares cercanos y aliados políticos, desplazando de forma “irrespetuosa” a personal con más de 30 años de servicio, incluidos funcionarios locales que no son cargos de confianza. “Una sobrina de Domingo Maza Zavala fue destituida sin justificación”, añadió el testigo.
Guerra interna en el PSUV
La purga diplomática ha sido interpretada como parte de una ofensiva del ala de Cabello contra Arias Cárdenas, quien en noviembre de 2024 fue cesado de su cargo como embajador. Poco después, intentó postularse como precandidato a la gobernación del Zulia, lo que habría desatado la ira del alto mando chavista. Cabello ordenó públicamente que ningún dirigente se postulara sin el aval de la cúpula.
Desde entonces, el exgobernador ha permanecido en silencio, según reveló el portal PuntoDeCorte, y le habría dicho a su entorno que teme ser el próximo en caer:
“Maduro no me contesta el teléfono. Suspendo la campaña. El próximo detenido puedo ser yo”.
Silencio oficial y violaciones diplomáticas
Las detenciones de funcionarios diplomáticos —algunos con estatus protegido por convenios internacionales— se producen en medio del uso creciente del aparato de inteligencia militar para saldar cuentas internas. El hecho de que un funcionario haya sido capturado durante una misión oficial con valija diplomática, sin el debido procedimiento, viola el principio de inviolabilidad diplomática, contemplado en la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas.
¿Nueva purga o mensaje interno?
Para analistas, este episodio es una señal del deterioro interno del chavismo, donde lealtades históricas como las de Arias Cárdenas ya no significan inmunidad. El mensaje es claro: nadie está a salvo si se enfrenta a la línea dura del régimen.
Al mismo tiempo, revela cómo el uso autoritario de instituciones como la DGCIM, sumado al hermetismo del Ministerio de Relaciones Exteriores, convierte a las misiones diplomáticas en escenarios de purgas, castigos y luchas intestinas.
Mientras tanto, familiares de los detenidos, exiliados venezolanos en México y organizaciones de derechos humanos exigen fe de vida, debido proceso y respeto a los derechos fundamentales de estos trabajadores del servicio exterior venezolano.