(Fuente: Efecto Cocuyo) La Universidad Católica Andrés Bello (UCAB) ha publicado un informe que señala que la inflación venezolana cerrará este año en más de 220% y la caída de la economía del país rondará el 2,05%.

El informe, publicado a través del Instituto de Investigaciones Económicas y Sociales (Iles) contiene análisis y proyecciones de los principales indicadores económicos de Venezuela, los que incluyen inflación, producción petrolera, PIB, importaciones, exportaciones y tipo de cambio, entre otros.

Algunas de las proyecciones que tienen para el cierre de 2025 son las siguientes:

  • La inflación será de 220,94%
  • El PIB total caerá 2,05%
  • La producción petrolera se contraerá 11%
  • El volumen de exportación de petróleo se reducirá 20% (en barriles por día)
  • Las exportaciones totales del país caerán 30,48% (en dólares)
  • Las importaciones totales del país caerán 13,14%(en dólares)
  • La oferta de divisas en el mercado cambiario formal caerá 40%

Los investigadores también mencionan «un contexto muy adverso de incertidumbre e inestabilidad», lo que está siendo ocasionado por variables externas e internas, entre ellas «los cambios en la política económica promovidos por el nuevo gobierno en los EE. UU», la “restitución de las sanciones petroleras y financieras” y la “evolución poco favorable del mercado petrolero”.

Con información de Efecto Cocuyo

Economía venezolana se contraerá en 2025

En un escenario como este, es de esperar una contracción de la actividad económica acompañada de la devaluación del tipo de cambio y una aceleración de la ya muy elevada tasa de inflación interna. Con una elevada probabilidad, la economía venezolana terminaría contrayéndose este año, aun teniendo en cuenta la reducción de casi 70% en el nivel de actividad que se experimentó entre 2014 y 2020″, resalta el Iies.

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Y añaden que «esto supone una reversión en la tímida tendencia de recuperación de la economía que se estima caracterizó al período 2021 – 2024. La tasa de inflación probablemente volverá a moverse en el intervalo de los tres dígitos, no solo como consecuencia de la acelerada depreciación de la tasa de cambio, sino también por la muy probable recurrencia al financiamiento monetario del gasto público, para ‘compensar’ la caída en los ingresos petroleros y tributarios internos, frente a un gasto fiscal rígido en extremo”, se lee en el documento. 

Los expertos del Iies advierten el impacto que el comportamiento de los principales indicadores económicos tendrá a corto plazo sobre la población.

«Para una economía que se ha contraído de manera tan significativa en un reducido plazo, contraerse aún más, incluso a tasas relativas que podrían parecer pequeñas, tiene importantes implicaciones sobre el nivel de bienestar social y la distribución del ingreso. La creciente informalidad del empleo y la incapacidad para desarrollar políticas sociales compensatorias, suponen un retroceso en la tímida reducción en los niveles de pobreza que se registraron durante el primer semestre de 2024”.

Reducción de la producción petrolera

«Las medidas, cuya magnitud e intensidad aún están por definirse con claridad, tendrán un importante impacto sobre la producción y las exportaciones petroleras y, con ello, sobre el ritmo de la actividad económica interna», refiere el informe.

De hecho, las expectativas de los economistas expertos del Iies-Ucab suponen que la producción petrolera caerá en 2025 a niveles promedio de 855.000 barriles por día (bpd), según las estimaciones basadas en información de fuente oficial reportada por la OPEP, desde 921.000 barriles diarios (bd) en 2024. En concreto, se trata de un descenso de 66.000 bpd.

«Una eventual reducción de la producción petrolera, entre 20% y 30%, que supone una reducción relativamente mayor en los ingresos externos de país, es un choque negativo de una magnitud considerable en el contexto de una economía que no cuenta con instrumentos fiscales y monetarios que le permitan absorber, al menos parcialmente, un choque de esta envergadura.

El Iies-Ucab estima que los ingresos petroleros en 2025 serían los menores en los últimos cuatro años, y se ubicarían en 14.100 millones de dólares sin descuentos. Si Pdvsa tuviera que aplicar reducciones de precios como resultado de las sanciones estadounidenses, el flujo de recursos derivados de las ventas externas de crudo se reducirían a 10.600 millones de dólares, una pérdida proyectada de 24,83%.

Cambio de tendencia

«Las perspectivas para 2025 significan un cambio importante en la tendencia a la recuperación económica que venía mostrándose en el país después de la pandemia. Entre 2021 y 2024 se estima que la economía, en promedio, mostró una tasa de expansión anual de 5,25%, mientras que el sector petrolero lo hizo a una tasa superior al 17%», dice el informe.

Esta tendencia histórica reciente marca «un claro contraste con la tendencia al deterioro que se prevé para 2025».

«En el contexto de la economía no petrolera, se espera que los sectores que tengan un ¨mejor¨ desempeño relativo sean: comunicacionescomercio y manufactura; pero en todo caso las tasas de expansión serían moderadas (entre 1% y 3%)».

Mientras que los sectores con desempeños menos auspiciosos destacan: construcciónelectricidad y agua, el sector financiero y los servicios de carácter gubernamental; los que, en el mejor de los casos, se mantendrán estancados.