Este miércoles se cumplieron 113 días de la detención arbitraria de Rafael Tudares Bracho, yerno del presidente electo en el exilio Edmundo González Urrutia. Su esposa, Mariana González, denunció nuevamente el silencio del régimen de Nicolás Maduro y la ausencia de garantías sobre el paradero y estado de salud de su esposo.

En un mensaje compartido en su cuenta oficial de X (antes Twitter), Mariana expresó el dolor que atraviesa su familia, especialmente en un día que debería estar marcado por la celebración: el cumpleaños de su hijo.

“Hoy nuestro hijo cumpleaños. Debería ser un día de alegría, de abrazos, de familia unida. Su mirada triste lo dice todo: su papá, Rafael Tudares Bracho, sigue desaparecido. Ya son 113 días”, escribió.

Sin acceso a defensa ni información oficial

Desde su detención, ocurrida en el contexto de la represión postelectoral impulsada por el régimen, Tudares Bracho permanece en paradero desconocido, sin acceso a abogados, visitas familiares ni información médica. No pesa ninguna acusación formal pública en su contra.

Diversos actores de la oposición han calificado su arresto como un acto de intimidación política, destinado a presionar al entorno familiar de Edmundo González Urrutia, quien fue reconocido como el verdadero ganador de las elecciones presidenciales del 28 de julio de 2024 por la Plataforma Unitaria Democrática.

Una política de represión sostenida

La detención de Tudares no es un caso aislado. Organizaciones como Foro Penal, Human Rights Watch y la Misión Internacional Independiente de la ONU han documentado el uso sistemático de detenciones arbitrarias, desapariciones forzadas y torturas contra ciudadanos vinculados a la oposición.

El caso de Tudares ha sido elevado a instancias internacionales por defensores de derechos humanos, quienes exigen su liberación inmediata y el cese de la persecución política contra familiares de líderes opositores.

Mariana González concluyó su mensaje recordando que su hijo “merece tener a su papá con él” y llamó a la comunidad nacional e internacional a no olvidar a los desaparecidos bajo custodia del régimen.

“Rafael no ha cometido ningún delito. Lo único que ha hecho es ser un buen padre, un buen esposo y amar a su país”, sentenció.