En un alarmante patrón que se replica en varias naciones con gobiernos socialistas, el periodismo independiente y la libertad de expresión enfrentan una creciente hostilidad y censura. 

La reciente escalada de agresiones en Bolivia, con al menos 51 vulneraciones a la prensa registradas durante el último proceso electoral y la crisis económica, se suma a un historial de restricciones que países como Venezuela ya conocen.

Organizaciones periodísticas en Bolivia, incluyendo la Asociación Nacional de Periodistas y la Asociación de Corresponsales de la Prensa Internacional (ACPI), han denunciado un clima de violencia y estigmatización que, según afirman, involucra directamente a actores estatales.

Funcionarios públicos y autoridades han recurrido a insultos como «prensa vendida» o «mentirosa» para desacreditar la labor informativa, una táctica que busca silenciar las voces críticas.

En Bolivia se usa la criminalización de la política como estrategia socialista

Un patrón de censura que incluye secuestros

El Observatorio de la Unión de Instituciones para el Trabajo de Acción Social reportó 495 casos de vulneraciones a la prensa entre 2022 y 2024, que incluyen la negación de acceso a la información y la violación del secreto de fuente. Sin embargo, uno de los incidentes más preocupantes fue el del creador de contenido Juan Carlos Villafuerte.

Las autoridades acusaron a Villafuerte de «desinformación» por sugerir a sus seguidores que cambiaran pesos bolivianos a dólares o criptomonedas debido a la pérdida de valor de la moneda.

El 29 de julio, personas vestidas de civil interceptaron al joven en la calle sin una orden de arresto. Su familia y allegados denunciaron el hecho como un «secuestro» y un intento de silenciar su voz.

Estos casos demuestran que la libertad de prensa se ha convertido en un blanco directo de los regímenes socialistas, que buscan controlar la narrativa pública para ocultar sus acciones y decisiones.

 La falta de una respuesta institucional ante estas agresiones subraya el riesgo que enfrentan los periodistas y comunicadores que se atreven a informar con honestidad e independencia.