Más de 400 protestas se han registrado en lo que va del mes de enero. La voz de un país se ha unido para exigir mejoras salariales y servicios básicos dignos. La crisis económica que se vive en el país ha sumergido a la población a vivir con salarios paupérrimos que no alcanza ni para los alimentos básicos.

La manifestación pacífica tiene un solo fin y es ser escuchados, la gente está dispuesta a seguir protestando, buscan que se respete sus exigencias.

Devaluación sin retorno

Estas protestas se han incrementado durante los últimos días, cuando el precio del dólar se ha ubicado, según el Banco Central de Venezuela, en 20 bolívares, trayendo altos costos que impactan en la calidad de vida de las familias.

Esta alza del dólar afecta a toda la población, pero principalmente a los trabajadores del sector público, quienes cuentan con un salario mínimo de 130 bolívares lo que equivale a 6,20 dólares, después de equivaler 29,68 dólares en marzo de 2022.

Hoy, este ingreso no alcanza para comprar un kilo de carne de res, que en carnicerías de Caracas lo venden entre 8 y 10 dólares, mientras que una familia necesita 50 veces ese monto solo para comer.

Es por esto que miles de trabajadores se han unido a las convocatorias, la mayoría del sector público, exigiendo aumentos salariales.