Dignora Hernández es una destacada política venezolana, conocida por su activismo en la oposición al régimen de Nicolás Maduro. Nacida en el estado Monagas, Hernández ha sido una figura clave en la lucha por la democracia y los derechos humanos en Venezuela, lo que la ha llevado a enfrentar la represión del gobierno chavista. Este artículo examina su trayectoria política, las circunstancias de su detención como presa política y las reacciones nacionales e internacionales a su caso, que se ha prolongado hasta julio de 2025.
Perfil Político y Trayectoria Profesional
Dignora Hernández, de 56 años, es una educadora de profesión, con un grado en educación, y ha dedicado gran parte de su vida al activismo político. Según la página de Wikipedia, fue elegida como diputada suplente por el estado Monagas en las elecciones parlamentarias de 2015, representando a la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) y al partido Cuentas Claras. Su trayectoria política se caracteriza por su compromiso con la transparencia y la defensa de los derechos civiles, lo que la llevó a unirse en 2016 a la fracción parlamentaria «16 de Julio», junto a otros doce diputados de partidos opositores como Convergencia, Vente Venezuela y Alianza Venezuela, donde sirvió como subjefa.
Esta fracción fue clave en la oposición al gobierno de Maduro, especialmente en la promoción de la Carta de Madrid, un documento que abogaba por la libertad y la democracia en la región. Hernández fue una de las firmantes de este importante manifiesto, según la información disponible en Wikipedia. En 2022, como parte de la Comisión Delegada de la Asamblea Nacional de 2015, abstuvo su voto en la aprobación de una reforma parcial al Estatuto que rige la Transición a la Democracia, que buscaba dar continuidad a la presidencia de Juan Guaidó. Este acto refleja su postura crítica y su compromiso con la gobernabilidad democrática en un contexto de profunda crisis política.
Desde 2023, Hernández asumió un rol más activo en Vente Venezuela, el partido liderado por María Corina Machado, donde se desempeñó como secretaria política y miembro del comando de campaña Con Venezuela. Su trabajo en este partido la posicionó como una figura central en la oposición, especialmente en los esfuerzos por promover la candidatura de Machado en las elecciones presidenciales de 2024, según reportes de Infobae y La Patilla.
Detención como Presa Política
El 20 de marzo de 2024, Dignora Hernández fue detenida arbitrariamente por funcionarios del régimen de Maduro, en el contexto de una ola de represión contra líderes opositores, particularmente aquellos vinculados a la campaña de María Corina Machado. Según un artículo de Infobae, la detención ocurrió tras reportes de persecución contra dirigentes regionales de Vente Venezuela, y fue descrita como el inicio de un «ataque» contra los principales líderes del partido antes de los comicios presidenciales del 28 de julio de 2024. Junto a ella fue detenido Henry Alviarez, coordinador nacional de Vente Venezuela, en lo que la oposición calificó como un «secuestro».
Hernández fue acusada de conspiración, legitimación de capitales y asociación, cargos que la oposición y organizaciones de derechos humanos consideran fabricados y políticamente motivados. Según La Patilla, estas acusaciones surgieron en el marco de planes supuestamente violentos, pero Vente Venezuela ha insistido en que su único «crimen» es luchar por la libertad de Venezuela. Desde su arresto, ha estado recluida en El Helicoide, la sede del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (SEBIN) en Caracas, un centro de detención conocido por sus condiciones inhumanas y el uso de tortura.
Desde su detención, Hernández ha estado incomunicada, sin acceso a visitas familiares ni a abogados de su elección, lo que ha generado preocupación por su bienestar. En octubre de 2024, se reportó que su salud se había deteriorado significativamente debido a alergias severas (angioedema y urticaria) y hipertensión, con riesgos de complicaciones respiratorias graves, según Infobae. A pesar de las peticiones de atención médica urgente, el régimen no ha proporcionado detalles sobre su estado de salud ni ha garantizado su acceso a tratamiento adecuado.
Reacciones Nacionales e Internacionales
La detención de Dignora Hernández ha generado una fuerte respuesta de la oposición venezolana y de organizaciones de derechos humanos. Vente Venezuela, liderado por María Corina Machado, ha sido incansable en su demanda de liberación, calificando su detención como un «secuestro» y un ejemplo de la represión del régimen. En febrero de 2025, el partido denunció que Hernández llevaba 11 meses detenida, y en junio de 2025, la cifra ascendió a 15 meses, según un artículo de La Patilla. La Plataforma Unitaria Democrática (PUD) y otras organizaciones opositoras han condenado su arresto, destacando que forma parte de un patrón de represión que incluye la detención de más de 932 presos políticos en el país, según el último reporte de Foro Penal.
A nivel internacional, la detención de Hernández ha sido criticada por organizaciones como Amnistía Internacional y Human Rights Watch, que han documentado la ola de represión postelectoral en Venezuela. Aunque no se encontraron menciones específicas de Hernández en los informes más recientes de Human Rights Watch, su caso encaja en el contexto de detenciones arbitrarias y violaciones de derechos humanos denunciadas por estas organizaciones, como se detalla en el reporte «Punished for Seeking Change» de abril de 2025.
Contexto de la Represión Política en Venezuela
La detención de Dignora Hernández debe entenderse dentro del contexto de la represión política en Venezuela, intensificada bajo el régimen de Maduro. Según Foro Penal, a mayo de 2025, había más de 1,000 presos políticos en el país, muchos de los cuales enfrentan cargos similares a los de Hernández, como conspiración y traición. Esta represión se ha intensificado en los últimos años, especialmente en el contexto de las elecciones y la creciente disidencia contra el gobierno de Maduro.